Ese día podría haber muerto

Birth Group
Sep 5
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La posibilidad de morir no solo es un título atractivo para este artículo, también es un sentimiento de paz y tranquilidad.

No me malinterpreten: planeo vivir MUCHOS años más, pero me encanta tener esa sensación de que si muriera hoy, mi vida habría valido la pena.

Este sentimiento apareció por primera vez hace casi 14 años, el día en que se tomó esta fotografía: por fin tenía un trabajo que me daba un poco de holgura y me llenaba profesionalmente; mi situación económica mejoraba y pude darme unas pequeñas vacaciones para disfrutar tiempo de calidad con mi hijo y mi esposa. Ese día, flotando en la playa, sentí por primera vez que toda mi vida había valido la pena. En ese momento mi sueldo y calidad de vida eran muy modestos, pero la sensación fue increíble. La vida tiene muchos sube y baja, pero este sentimiento me ha acompañado en varias etapas. Y justo estos días lo he vuelto a experimentar. Por eso quise analizar los factores que me ayudan a replicarlo y sostenerlo:

Equilibrio personal: No importa qué tan absorbente o cansado sea tu trabajo, date pequeños momentos para ti y para quienes estimas.
Plenitud laboral: Más allá del puesto o el sueldo, lo importante es sentir que estás creciendo, que enfrentas retos y disfrutas lo que haces, incluso con altibajos.
Disfrutar el camino: Tal vez tengas aspiraciones mucho más grandes que tu realidad actual, pero no puedes esperar hasta lograrlas para disfrutar la vida. Aprecia los pequeños triunfos, acepta tu realidad y encuentra esas cosas cotidianas que te hacen feliz. Puede ser tan simple como salir a caminar, dedicar una tarde a dibujar o visitar a un amigo que no ves desde hace años.